En el mundo de las carreras populares no todos vuelan, y después de los vencedores, llega el furgón de cola y el coche escoba.

Y es en ese lugar donde el running se ve de modo diferente.

Perseguimos a las gacelas a nuestro ritmo: el trote cochinero...


Empezamos a hacer hueco para el turrón: Cross O Salgueiral 2012 en O Barco

Tras la resaca de la subida a Dragonte, en pleno mes de diciembre, sólo quedan los crosses y las carreras de San Silvestre para finalizar el año. En este tiempo, estamos empezando/finalizando la temporada, es decir, empezando la preparación del 2013 y finalizando las carreras del 2012.

A pesar de ser mi última semana de vacaciones del año, apenas pude entrenar inmersa en mil historias, y sólo pude completar un (lamentable) entreno el miércoles, en el que las piernas no respondían, estaba asfixiada y los oregones se atragantaban como un polvorón en Navidad. Era como si no pudiera con el alma. Además en El Bierzo las noches ya son frías y parece que el cuerpo no se acostumbra.

Pero mi inseparable Carmiña, compañera Ulera paisana valdeorresa, me despertó de ese letargo runneril con un anuncio: "el domingo hay un cross en O Barco, te animas?". ¿Un cross? Eran esas pruebas que corríamos en las pistas de carbonilla de ENDESA, con "foso" incluido, en invierno, ¿no? Desde la edad cadete no corría uno, y recuerdo los campeonatos provinciales del Monte San Isidro, en enero, con un frío que para qué contar.

Así que ahí estaba yo, madrugando un domingo para ir a O Barco, donde me encanta correr, para participar en una prueba popular, sin chips, con cronometraje manual y con un chocolate caliente al finalizar la prueba. Pruebas pequeñas, con mucha intención y ganas de que los niños hagan deporte. Medallas para todos ellos y, como llegaron para todos, también para los mayores. En la era de las pruebas con bolsa del corredor, isotónica, agua, fruta y 10€ de inscripción, viene bien volver a los inicios.

La prueba, denominada "O Salgueiral", por el nombre del área recreativa en la que se desarrollaba, estaba organizada por el Concello, el incombustible ADAS Valdeorras (siempre apoyando el atletismo) y la Asociación TROTADAS. Participamos principalmente corredores de Valdeorras y un grupo de Trives (muy animoso, por cierto), y dos "locas" con la camiseta fucsia de ULE Bierzo. Dimos algo más de tres vueltas a un circuito de 800m en las orillas del Sil, con sube-bajas que rompían el ritmo, con bastante público y muchos niños que animaban a todo el mundo.

En la primera vuelta, por la orilla del río. (Foto: Xosé Manuel Álvarez)

Sin Garmin que me diera ritmo (se me paró en mitad de la prueba), no supe ni ritmo ni nada, e iba a todo lo que daba, asfixiada en la última vuelta, pero con sprint incluido para que no me adelantara mi gran amigo Paco Bao. El objetivo era finalizar la carrera y pasarlo bien (aunque las fotos digan lo contrario), obteniendo un 7º puesto (de 10). :)
Última vuelta, en solitario. (Foto: Xosé Manuel Álvarez)

Después, entrega de premios en la que Carmen quedó 3ª en la carrera absoluta, una cañita reparadora y de vuelta a Ponferrada para comer.
Posando con el trofeo. Esta Carmen... donde va triunfa!! :)

Todavía no hay demasiadas carreras publicadas en el mes de diciembre (las San Silvestres no se han anunciado todavía), pero espero reunirlas y compartirlas con vosotros en los próximos días.




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